martes, 12 de septiembre de 2023

LLEGANDO A LOS 60 AÑOS.

 

LLEGANDO A LOS 60 AÑOS. “GRACIAS”

"Uno puede devolver un préstamo de oro, pero está en deuda de por vida con aquellos que son amables." (Proverbio tradicional)

Hoy 12 de septiembre, cumplo un año más de vida, pero como nunca antes celebrado con bastante anticipación, por mis compañeros, ex compañeros, amigos de corazón a los que les digo que la palabra “gracias” se queda demasiado corta para expresar toda mi gratitud a todos y cada uno de ustedes, no hay palabras suficientes para expresar mi agradecimiento sincero, sus palabras de aprecio han sido el mejor regalo, ya que además de celebrar mi cumple, se transformó en un homenaje a mi labor como docente, ya próxima si Dios lo permite a jubilarme, aunque preveo que este año lectivo lo termino enterito.


Recibir un homenaje por una labor, que es propia de nuestras obligaciones, y por la que nos pagan, no es esperada, por lo menos de mi parte, pero se siente muy lindo recibir, lo inesperado de personas con las que hemos compartido, meses, años de trabajo, con unos, tal vez con más afinidad que con otros, pero con todos guardando el respeto necesario y dando lo mejor de nosotros, para hacer lo mejor que podamos en nuestras labores diarias. Aunque no lo diga, mi corazón recuerda cada gesto amable, cada favor y cada sonrisa que alegró mi vida. Gracias a todos los que hacéis de mi vida la mejor, estaré eternamente agradecida.

Algunas de las fotos de recuerdo.
https://photos.app.goo.gl/kKeR8TfzxRdCXt4y7

domingo, 10 de septiembre de 2023

BIOGRAFÍA VÍCTOR HUGO MORERÍA LOOR

 

BIOGRAFÍA VÍCTOR HUGO MORERÍA LOOR


Víctor Hugo Moreira Loor, nació en Chone, el 28 de diciembre de 1940, murió el 27 de enero de 2000. Estudio en la escuela Juan Montalvo y la secundaria en el  normal Eugenio Espejo, donde se graduó como Bachiller en Ciencias de la Educación. Se casó con la Profesora Mariana de Jesús Solórzano Ferrín, con la cual procreo cuatro hijos: Yanina, Maricé, Katerine y José Víctor Hugo Moreira Solórzano. Se desempeñó trabajando en varias áreas, entre las principales, taxista, ganadero, comerciante  y docente, en esta última actividad lo hizo en el entonces Colegio Nacional Técnico “Raymundo Aveiga”, en el año de 1973, acogiéndose a la jubilación por enfermedad en el año de 1993, es decir laboro por un espacio de 20 años, principalmente en la asignatura y área de Ciencias Naturales en el ciclo básico. Se destacó como líder en la comunidad de Chone, fue socio fundador y  presidente de la Cooperativa  de taxis Atahualpa; presidente de la Asociación de distribuidores de gas de la provincia de Manabí y Presidente de la Asociación de profesores del colegio Raymundo Aveiga.



SEMBLANZA DE UNA BELLA DAMA

 SEMBLANZA DE UNA BELLA DAMA

Cabello de plata, ojos de mirar dulce que han visto lo mejor y lo peor del mundo, pero por su alma noble conserva siempre la sonrisa que calma los dolores y heridas de la vida.

Mariana de Jesús Solórzano Ferrín es la segunda hija de la entrañable pareja formada por don Enrique Alfonso Solórzano Barberán y Julia de las Nieves Ferrín Solórzano.

La niña juguetona, laboriosa, que acompañaba a Papito Alfonso en las vegas de Santa Martha, nació el 10 de diciembre de 1942, desde siempre buscó tareas para emprender, pues su carácter la motivaba a tomar la iniciativa y no desmayar en el trabajo. Por ello se inició en el magisterio muy jovencita, con 16 años en Calceta, y luego en la Escuela “Aurelio Salazar” de Chone, institución que se nutrió de su sapiencia, entusiasmo, responsabilidad y generosidad en el trato con los estudiantes y en todas las actividades educativas.

Heredando la gentil belleza de la mujer chonense, creció en señorío y exquisitez lo cual sumado a su brillante intelecto la hicieron el ideal de la juventud de esa época. Mas esta dama tan especial encontró la otra mitad de su alma en el  caballero chonense don Víctor Hugo Moreira Loor con quien se casó el  27 de octubre de 1962  procreando 4 hijos:  Yanina Guthnara, Mariana Maricé,  Eva Katherine y José Víctor Hugo, quienes completaron la dulce felicidad de esta pareja que tuvo siempre como propósito de vida la formación de una familia cariñosa, noble en sus virtudes, y que hoy colman el corazón de la Mami Mariana con 5 nietos y 1 una bisnieta, completando el legado familiar.

El enero del 2000, luego de una enfermedad muy dolorosa perdió al compañero de su vida, pero su romántico corazón guardó siempre la ternura para entender a todos aquellos que buscan formar una familia y tienen en ella un oído atento y el sabio consejo.

Heredó de su madre, además de la belleza distinguida la magia en sus dedos para el tejido, así a todos nos ha entregado alguna muestra de su arte y vocación, todos los niños de la familia han recibido las prendas en las que se entretejen maravillosamente el legado familiar, el fino arte del tejido y el generoso gesto cariñoso de esta tía divina.

Mujer virtuosa que

Amor entregas en cada gesto,

Risueña en tu mirar

I en tus palabras

Afable siempre con gentil mirada

Nos acoges con calidez en tu hogar

Irradiando cariño maternal, así como

Total gentileza y hospitalidad

Albricias por tu vida TÍA QUERIDA.

Chone, diciembre 10 de 2022

Palabras expresadas la Mg. Magaly Avellán Avellán de Arteaga, en el homenaje por el cumpleaños número 80 de la Sra. Mariana de Jesús Solórzano Ferrín.

 

Memorias de un ayer

Estos hechos sucedieron en el cantón Chone, en el barrio de Santa Martha, en una finca llamada “BALSA MARAGUA”, la que era un encanto tropical, lleno de árboles principalmente frutales, por donde pasaba las cantarinas aguas del rio Chone, donde las personas disfrutaban nadando y haciendo bromas a los señores Balseros que navegaban por el rio, llevando plátanos, otras frutas y mercadería en general.

En esta propiedad vivía la familia Solórzano Ferrín, cuyo hogar tenía varios hijos y el siguiente relato, es de una sus hijas, quien se parecía mucho a su mamá, a la que, ayudaba en las tareas del hogar y de la propiedad, tenia de tez morena, y le gustaba hacer muchas bromas.

Cuenta que, en una de las quintas vecinas, también hermosa, con árboles de limones, naranjas, mangos etc., cuyos dueños eran familia de la suya, pero que por circunstancias lamentables tuvieron que dejar la casa, y la dejaron al cuidado de unos amigos, Don Guido Lucas y Ana Murillo; un día anocheciendo, alrededor de las seis de la tarde, a la niña se le ocurrido hacerles una broma, lanzando hacia el techo de la casa limones recogidos, de los caídos de los árboles. Al día siguiente los señores cuidadores aterrados del ruido que hacían los limones sobre el techo, abandonaron la casa, y ni siquiera porque se les explico que, había sido una broma, no creyendo en ésta, y se fueron.

En otra ocasión, en las playas del bello rio Chone, un viernes santo, jugaban los hermanos de la niña (Barni y Miguel), junto con unos amigos (Napoleón, Toti, etc.), al pepo, bolichas, etc., y a la niña se le ocurre hacerles una broma, se vistió de negro y les comenzó a lanzar piedras y palos, los niños aterrados corrieron a la casa, a contar lo que habían visto, “una persona vestida de negro, con la cabellera alborotada”. Por otra parte, la niña bromista, también emprende la carrera y sube a la casa por la parte de atrás, a través de un cerco del chiquero, a la azotea, disimulando tranquilidad, como si no hubiera hecho nada, pero su mamá Doña Julia Ferrín, sabiendo que tenía una hija muy bromista, enseguida llamó a su hija para investigar que había hecho, pero ella estaba tranquila y callada. Los niños estaban tan aterrados que nunca más jugaron en el rio, un viernes santo.

También cuenta, que el destino a ella le jugo una broma, un día la mamá la envió a comprar huevos, donde una vecina que vivía al otro extremo de la finca, la Señora Filadelfia, quien era bella en el trato con sus vecinos, a quienes regalaba corozos, mangos etc.; ya de regreso al anochecer, tras la niña, la seguía un gorrioncillo negro, de cabeza y pecho rojo, el cual iba de rama en rama, ella escuchaba el silbido del pajarito, quien supuestamente le decía “judía allá va”, es así, que la niña le entro mucho miedo y comenzó a correr y correr, quebrando todos los huevos que había comprado. Fue tanto el susto que paso, que sus familiares festejaron lo que había ocurrido con el pajarito, ya que era una forma de pagar, por todas las bromas que ella hacía.

Relatos de la niña, hoy Doña Mariana de Jesús Solórzano Ferrín.

 



Momentos de Vida

 

Ideas y algo más

Hoy me surge la chispa y se me ocurre volver a activar ese bloc que comencé hace años para publicar biografías e información que se les pedía a los estudiantes y que, por falta de una página web institucional, no podían realizar, y reflexionando sobre esto, surge otra idea o critica a un ex gobierno que nos prohibió, a las instituciones públicas tenerlas, creo que, no visualizaron que la tecnología y el alcance de la información es imparable.

Por otra parte, también la parte administrativa de las instituciones educativas sufrieron a ausencia de servidores exclusivamente administrativos, quedándose las bibliotecas de los colegios sin personal que les atienda, y las secretarias, subsistiendo con la colaboración docente, mucho de ellos a los que se les pide labores para lo que no estudiaron, así es que los blocs, es una herramienta de comunicación, que nos ayuda a suplir en parte, a las bibliotecas desaparecidas.

Para la fiesta de la lectura en la institución donde trabajo, en el año 2017 escribí mis datos biográficos y anécdotas de vida, y se quedaron por ahí archivadas, ahora buscando ideas de agradecimiento al homenaje que me realizaron compañeros, excompañeros, de trabajo, pero realmente amigos de corazón, personas con las que he tenido mucha afinidad, y un sincero aprecio, encontré un artículo, que ahora pongo aquí, pero al que adicionare, más adelante palabras, que pasan por mi mente, y que en mi sentir es tan grande que es difícil decirlo con palabras.

Momentos de Vida de Yanina Guthnara Moreira Solórzano

Remontarnos años atrás no es fácil, y menos aún para hablar sobre una misma, pero veamos, nací un 12 de septiembre de 1963, en Chone, mis padres son la Prof. Mariana de Jesús Solórzano Ferrín, y el Prof. Víctor Hugo Moreira Loor. Recuerdo que hasta que tuve cinco o seis años vivíamos en el barrio de Santa Martha, en una casa de caña construida en un solar, que el padre de mi madre, le había regalado cuando se casó, tenía un patio donde había varias matas de café, y cuando las pepitas estaban rojas las cogíamos e íbamos a venderlas un poco más allá de la casa, donde había una piladora de café, una vez, en el camino nos encontramos una iguana inmensa, no nos atrevimos a pasar, tuvimos que esperar a que se fuera para poder ir a entregar los granos de café.

Otro momento inolvidable vivido, es en la propiedad de mi abuelo materno, que colindaba con nuestra casa, solo teníamos que caminar un poco, por en medio de árboles frutales y llegábamos a la casa, que estaba construida frente al rio Chone, mamita Julia, como le decía a mi abuela y papito Alfonso, como le decía a mi abuelo, eran dos seres muy consentidores, de su primera nieta, mi abuelita tejía y cocía, los más hermosos modelos para vestir y mi abuelito lo recuerdo a la orilla del rio, sentado, con su machete cortando cacao, dándome para que chupara las semillas, luego me colocaba encima de las terrazas, donde se secaban las semillas de cacao, para que caminara encima de ellas, tratando de separarlas para que se secaran bien, para mí eso era un juego, aunque realmente, es parte del sistema de producción del chocolate.



Aproximadamente por 1968, nos cambiamos de casa, pasamos a vivir en el centro, en una casa también de caña, que era de mis abuelos paternos, concretamente al lado de ellos, años después de que mis padres emprendieran en algunos negocios, aparte de ser docentes, y  pudieron comprar la casa que colindaba con la que vivían, y después comprar el terreno de la casa de sus padres a todos sus hermanos. Actualmente vivo con mi madre, en el primer piso alto, ya que mi padre falleció hace algunos años atrás, soy de estado civil soltera, soy la mayor de cuatro hermanos, me sigue Mariana Marice, vive con sus hijos en el segundo piso, Eva Katerine vive en USA y José Víctor Hugo, con su esposa y tres hijos, vive entre Manta y Chone, en casas adquiridas por ellos.

Mi abuelo Antonio, era chofer, mecánico, arreglaba baterías de carros, pero también le encantaba la música, mi abuelita Rosita, la que realmente era, tía abuela, porque la mamá de mi padre murió, cuando él era pequeño, y su papá se volvió a casar con una de sus cuñadas, la que se hizo cargo de los cinco hijos de su hermana, ella era comerciante y productora, hacia los más exquisitos manjares, suspiros y rompopes para vender.

De mis tíos, recuerdo a mi tía Rosa Eva Moreira Loor de Moreno Polo, tocaba el acordeón y el piano, compuso varias melodías entre ellas el Himno al Colegio Raymundo Aveiga, le encantaba deleitarnos con su música, y la de su padre, porque aunque él, no fue conocido en su tiempo, compuso cinco melodías; con una grabadora toca cinta, el esposo de Doña Evita, las dejo grabadas, tal vez tratando de que no queden en el olvido, por eso yo también con la grabadora de sonido de la computadora las pase a archivo digital y de ellas ya tengo unas subidas en YouTube, para que cualquier persona las pueda escuchar.

En primer año de la escuela lo hice en la Escuela “Aurelio Salazar”, pero mi madre pensaba que para evitar conflictos de intereses, era mejor que sus hijos estudiaran en una institución, donde ni ella, ni mi padre trabajaran, así que pase al segundo grado, a la escuela “México”, ahí termine la primaria y pase en la secundaria al Colegio Nacional “Amazonas”, ahí me incorpore como bachiller en Humanidades Modernas especialidad Físico Matemático.

Como anécdota de mi la escuela recuerdo que había una sesión de árboles, donde se creía que habitaba el diablo, todos los días mis compañeras y yo desafiamos, en la hora del receso al diablo, yendo hacia ya, y cuando se suponía que venía a cogernos corríamos, hacia el lado opuesto, hasta que me caí y raspe las rodillas,  de ahí nunca más volví a ir hacia allá.

También fui víctima de los castigos de los reglazos, una vez en segundo grado, porque no me sabia las tablas de multiplicar, la profesora me castigo con una regla, bueno aunque esas acciones se te graban en el corazón, también es verdad, que me sirvió para que me aprendiera las tablas. La segunda vez, que me dieron un reglazo, fue porque no había llevado un cuaderno, que supuestamente la profesora había pedido, pero ¡oh sorpresa! la mayoría del grado  no lo llevo, nosotros aducíamos, que la profesora no, nos había avisado, pero igual a todas nos castigaron, cuando llegue a la casa llorando, le conté a mi padre, quien a pesar de lo fregado que era, al día siguiente le fue a preguntar a la profesora las razones del castigo y manifestarle que no estaba de acuerdo, yo estaba en quinto grado, creo que sirvió para que la profesora, nunca más volviera a castigar físicamente a algún estudiante.

Del colegio recuerdo que del básico, debo agradecer aprender a escribir a máquina, ahora no tengo dificultad de usar todos los dedos en la computadora, pues en ese entonces se daban las optativas y yo estuve en Comercio y Administración, aunque también viene a mi mente el sacrificio que hacia caminando desde mi casa, que quedaba en el centro, hasta el colegio con la máquina de escribir agarrada con las dos manos, en ese momento odiaba a ese artefacto, porque había algunas calles de por medio. También recuerdo que tuve un profesor de matemáticas el Ing. Enrique Reyes, quien al parecer le gustaba mucho el campo, porque cuando nos daba logaritmos, nos exigía llevar el libro de logaritmos y decía “NO SE OLVIDEN DE SU MACHETE”, esta es su herramienta de trabajo, excelente maestro, con el aprendí mucho, en sexto curso, fue nuestro dirigente de curso, nos llevó de paseo de fin de año, viajamos hasta Cali- Colombia, fue realmente hermoso.

En ese entonces no había elaboración de proyecto de vida, o de los objetivos que nos trazamos cumplimos o esperamos cumplir, he vivido mi vida, día a día, al terminar la secundaria pensé que quería ser arquitecta, pase un año viviendo en Guayaquil, venía a Chone cada 15 días, pero cuando me tocaba la hora de irme, me entraba una nostalgia y ganas de llorar, es decir, no me quería ir, hasta que un día tome la decisión, me voy a Chone, “vivir lejos de mi tierra no es para mí”.

Al llegar a Chone, entro el accionar  de mi querida madre, quien me dijo, “o estudias o te quedas en la casa haciendo oficios”, entonces acudimos a una de mi tías y su esposo, que por ese entonces estaba también estudiando y tenía muy buenos contactos en la Universidad Técnica de Manabí, para ver que podía estudiar, y como estaba en Portoviejo, podía venirme a Chone, todos los fines de semana, o cuando no tuviese clases, entonces de las opciones que había, escogí “Economía”, me incorpore de Economista en agosto de 1991.

Anécdotas o buenos momentos vividos en familia, son muchos, como por ejemplo: las idas los fines de semana al cantón el Carmen, donde teníamos una propiedad y disfrutábamos del campo, o las idas a la playa de San Jacinto, o simplemente cuando hacia mis experimentos culinarios para navidad o un cumpleaños y nos sentábamos a la mesa en familia a degustarlos, pero viene a mi mente uno en especial, el paseo que hicimos por allá por el año 1991 o 1992, a las Islas Galápagos, un tour en crucero que se llamaba “Galápagos Explorer”, fueron cuatro días de navegar por las islas, caminatas, y apreciación de la riqueza natural de las islas encantadas, inolvidables, grabadas en mi mente y corazón.

Luego de graduarme, llego el momento de buscar empleo, gracias a las conexiones del esposo de una tía, quien desempeñaba un alto puesto en el Ministerio de Bienestar Social, logre trabajar en Portoviejo como Analista Financiero, por espacio de varios meses, pero renuncie porque lastimosamente en el programa que trabaja, se involucraron personas peligrosas, por lo que preferí evitar riesgos innecesarios, pero por ese entonces ya se había publicado un concurso de méritos y oposición de docente de Contabilidad en el Colegio Nacional Técnico “Raymundo Aveiga”, en el que postule y después de varios meses gane el concurso y entre a laborar como profesora, no de una asignatura, sino de varias, era una enciclopedia andante.

Han transcurrido varios años, desde que entre a trabajar como docente, concretamente el 30 de abril de 1993, después de unos meses de hacer amistades, el Lcdo. Guillermo Rodríguez Patiño, me hacía bromas, porque yo tenía un título que no era docente, decía que, el gobierno me iba a sacar, por lo que tome en serio sus bromas, así que aproveche la ventaja de estudiar a distancia, que ese tiempo promocionaba la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) y obtuve el título de Profesora de Educación Media, por allá, por el año de 1996; en el 2010 gane un concurso como Vicerrectora en la misma institución, por lo que me vi en la necesidad de volver a estudiar y en 2012 obtuve el título de Magister en Gerencia y Liderazgo Educacional.

Me encanta ser docente, he tratado de guiar en el aprendizaje a los estudiantes, pero también he aprendido de otros docentes, recuerdo los consejos del Lcdo. Bolívar Ortega Avalos, quien me designo para estar a cargo de la elaboración de horarios, como preparándome para que lo reemplazara posteriormente a su temprano fallecimiento; o con los pedidos de el Dr. Nicolás García Andrade, siendo Rector, por allá por el año 2004, que nos puso al área de Comercio y Administración, a la comisión de gestión institucional de la que fui parte, a realizar un estudio de mercado para ver la posibilidad de abrir nuevas especialidades, en ese entonces solo ofertábamos tres; así como también nos solicitó realizar un estudio del personal, para ver si contábamos con el elemento humano necesario, todo eso lo hicimos sin tener experiencia alguna, solo investigando y haciéndolo en un trabajo en equipo de docentes y estudiantes, a partir de los resultados de estos estudios, se comenzó a ofertar dos especialidades más.

Otra vivencia fue como miembro de la comisión de gestión de educación técnica, aprendiendo y capacitando sobre estándares educativos y sus descriptores, fueron algunos años siendo parte de un equipo provincial, en el que nos hacían trasladarnos a otras ciudades a compartir experiencias, cada esfuerzo valía la pena, ahora solo quedan recuerdos, pues estas capacitaciones presenciales, han sido remplazadas por las virtuales, que si bien, particularmente las prefiero, no es lo mismo que cuando se comparte personalmente con otros seres humanos y se recibe el calor fraterno de sus emociones, puntos de vistas, gestos  y observas, reacciones que no puedes ver virtualmente, pero hay que estar a la par con la tecnología y solo queda preparase día a día, para seguir formando a nuestros jóvenes estudiantes, lo mejor que se pueda hacer.


jueves, 30 de agosto de 2018


BIOGRAFÍA DE DOÑA 
ROSA EVA (EVITA) MOREIRA LOOR DE MORENO POLO




“El canto de tu piano se ha silenciado, pero en nosotros sonarán las teclas de tu gran corazón”
Carmen Andrade de Ontaneda.

Doña Evita, como cariñosamente le llamaban sus amigos, nació en Chone, provincia de Manabí, el 11 de julio de 1931. Fueron sus padres el Sr.Segundo Antonio Moreira Mero, compositor de música y doña Rosa Eva Loor de Moreira ya fallecidos. Desde su niñez se inclinó por la música, sus padres se dieron cuenta de su afición por este arte y le compraron un piano, sus primeras lecciones las recibió de la profesora señora Teresa Rosado de Intriago y  de otros profesores que llegaron a esta ciudad.

Por sus dotes artísticas, en el año 1949 le solicitaron colaborar con el Normal Eugenio Espejo de Chone, para preparar una velada literario-musical, en donde se  desempeñó admirablemente; por esta razón, el Honorable Consejo Directivo del plantel y el personal de profesores, solicitaron al Ministerio de Educación Pública de ese entonces, el nombramiento como profesora de música de dicho establecimiento.

En el año 1965 continuó trabajando en el Normal Eugenio Espejo de Chone por espacio de  quince años, en donde inculcó a sus alumnos el aprecio y amor por la música para difundir el sentimiento de las mismas, investigó con varios alumnos sobre la historia y el folklore de Manabí. Por su gran labor cultural, se hizo acreedora a muchas felicitaciones en su ciudad natal, por ser autora del Himno de la Escuela Fiscal República de México, Colegio Nacional Raymundo Aveiga, Colegio Particular Presidente Alfaro, Escuela Fiscal Manabí.

Recibió menciones honoríficas del Colegio Normal Eugenio Espejo y de varias instituciones sociales de su tierra natal y entre ellas las de jefa de educación musical del Ministerio de Educación Pública Ernesto Rivadeneira V, en el año 1973, en este mismo año, colaboró formando un coro en el Colegio Nacional Técnico “Raymundo Aveiga”.

Posteriormente al año 1976 se radicó en la ciudad de Quito, trabajando en el Colegio Nacional Experimental María Angélica Hidrovo, desempeñando iguales funciones durante diez y siete años y terminó su carrera docente para acogerse a la jubilación en el año 1993, desde esa época residió en la ciudad de Quito, junto a su esposo el Dr. Daniel Moreno Polo,  también jubilado, no tuvieron descendencia. El 4 de abril del 2013 fallece en la ciudad de Quito, producto de una leucemia mieloide aguda.

Evita, era una persona con un temperamento alegre, una mujer soñadora de la música, a quien le encantaba deleitar con sus notas musicales a sus visitantes, no solo entontaba el piano, también el acordeón, compartía con muchas amistades, con las que entablaba vínculos de mutuo afecto. Sus amigos cuando la visitaban decían que iban a divertirse sanamente, porque su espíritu mezcla de niña mujer, daba la sensación de compartir con una alegría fuera de lo común, siempre recibiéndolos con una cálida sonrisa.

De espíritu sensible, de formación cristiana católica, muy devota de la Virgen del Perpetuo Socorro, siempre decía que su vida era intensa en la fe del Señor, pero también era intensa en prodigar amor a los suyos, intensa en compartir con sus amistades sus horas felices, que alcanzó en la música a transmitir aquello que sólo es, privilegio de pocos. 

miércoles, 29 de agosto de 2018

BIOGRAFÍA DE DON RAYMUNDO AVEIGA MOREIRA

RAYMUNDO AVEIGA MOREIRA



SU VIDA Y OBRA

El siguiente aporte es una transcripción de un pequeño libro editado hace años por el personal de ese entonces Colegio Nacional Técnico “RAYMUNDO AVEIGA”.

PRESENTACIÓN

Este trabajo fue realizado por quienes hacían ese entonces Colegio Nacional Técnico “RAYMUNDO AVEIGA”, aspirando cumplir con un anhelo cultural de muchos años, el cual es rescatar para el recuerdo la obra de no de los más grandes hijos de Chone, Don Ramón Raymundo Aveiga Moreira.
Aprovechando la oportunidad que les brindo la tesis de grado del Lic. Carlos Humberto Avellán Vera, al referirse a este personaje, no se hizo, otra cosa que tomar de sus páginas todo lo referente al respecto y es esa una de los razones que como imperativo de la época, se animaron a difundir: al poeta y escritor de ideas elevadas, al funcionario ejemplar y ciudadano excelso, virtudes que adornaron la persona de este ilustre caballero chonense.
Con justísima razón nuestro querido colegio lleva su nombre, en honor a la verdad no fueron ni sus contemporáneos, fue gente de otras playas, las que desempolvaron sus poemas, sus  dramas, sus viejos folios, donde se ha encontrado mucho y no poca razón para honrar su memoria.
Su busto tallado de granito eterno, sus aulas y patios donde la actual juventud y las que advengan irán afanados cantando el Himno al colegio, que es una especie de credo nuevo para el hombre chonero y manabita: #Juventud la cultura se impone, no la fuerza del arma homicida…….”
Manifiesto es por quienes lo trataron, fue un gran incomprendido y lo ratifica el poeta Elías Cedeño Jerves, en un poema que publica es sus libro “Por todos los caminos”.
“Yo tengo fe que nuestro pueblo, Chone pondrá a alguna calle, a algún colegio tu precioso nombre……
Yo tengo fe que la altiva juventud chonense que bebió la luz de tu intelecto…..” etc.
En cuanto a la calle: el municipio que presidio el Dr. Virgilio Aizprúa Párraga, mediante la ordenanza respectiva en el año 1974 denominó a una calle de Chone con el nombre de Raymundo Aveiga.
Nuestro querido colegio perennizará su memoria con su nombre.

 INTRODUCCIÓN BIOGRÁFICA DE RAYMUNDO AVEIGA MOREIRA

Don Ramón Raymundo Aveiga Moreira, destacado Ecuatoriano y esclarecido Manabita, nació en la tierra de los Naranjos en Flor, Chone, el 15 de Marzo de 1876 y fallece el 16 de octubre de 1959.
 Fue hijo de Don Raymundo Aveiga y de Doña Mercedes Moreira Zambrano; no fue hijo único del matrimonio Aveiga Moreira, pues la familia se componía de tres varones y siete mujeres, un total de doce con sus progenitores: Sus nombres eran Ramón Raymundo, Luis Alberto, Julio, Magdalena, Silvia, Caridad, Teresa, Dolores, Rosario y Mercedes.
La partida de nacimiento de Don Raymundo Aveiga consta en el folio 24 del libro de bautismo de la Pa­rroquia Chone, que principia en el año 1869, cuya cría estaba bajo la jurisdicción de la del Cantón Rocafuerte, al que entonces pertenecía Chone.
Fue bautizado por el Clérigo Ibérico Don Felipe C. Castelar, hermano del eminente orador, político, tribuno y parlamentario español Don Emilio Castelar, que llegó a ser Presidente del Consejo de Ministros de la Madre Patria, cuando era Rey de España Don Al­fonso XII de Borbón. El bautismo se realizó en la iglesia de San Cayetano de Chone.
Don Raymundo Aveiga, desde temprana edad de mostró tener una clara inteligencia y un afán de superación intelectual poco común, llegó a ser uno de los primeros discípulos del brillante  e inolvidable pedagogo hijo de la Tierra de Alfaro, Don Aníbal San Andrés Robledo.
En el libro de Hidrovo José (1999), “dice que simboliza la sabiduría, cualidad que era innata y natural, de espíritu selecto y cultivado con calma y equilibrada. Era sereno, calmado con un sentimiento, misteriosos, inteligente, reflexivo, tenía el alma de niño, porque además un maestro y entusiasta conductor de juventudes”.
Una vez cumplida su fase de Instrucción Primaria su amor al estudio lo llevó a Guayaquil ingresando a las aulas del famoso Colegio Nacional "Vicente Rocafuerte", donde recibió cátedra del sabio educador Don Tomas Martínez.
Posteriormente ya graduado de Bachiller en el primer Plantel de Educación Secundaria de la Patria del Pacifico, regresó a su tierra natal Chone.
Este erudito, unió su destino bajo los lazos del matrimonio con el de la respetable dama Chonense Doña Aleyda Barberán Macías, la ironía del destino condenó a los esposos Aveiga Barberán a no tener descendencia, pero a pesar de ello, criaron, educaron y formaron bajo su innata filantropía a más de doscientos seres humanos de ambos sexos, de diferente posición social y de variada condición racial y quienes superviven hasta hoy de entre esta legión que vástagos espirituales humanista, filántropo y pensador que nos ocupa.
En los comienzos de la década de 1930, tomando en consideración sus altos dotes de escritor y su versación en múltiples campos del saber humano, los dirigentes del Diario “El Telégrafo” de Guayaquil, le confiaron la columna editorial del decano de la prensa ecuatoriana, con sus docta péñola, Aveiga Moreira enfocó los más diversos problemas que gravitaban en aquel entonces sobre la vida del Pueblo Ecuatoriano.
El sabio Ecuatoriano Don Modesto Chávez Franco cronista vitalicio de la Ciudad de Guayaquil y Padre de "Rodrigo de Triana", admirador de Aveiga, lo llegó a calificar como a uno de los grandes virtuosos del periodismo ecuatoriano; y Don Alfonso Simonds que años más tarde llegó a ser Editorialista del citado rotativo, lo calificó como a "El Manabita más erudito que había conocido en la presente generación.
El brillante paso de Aveiga Moreira por la austera tribuna del pensamiento escrito que es Diario "El Telégrafo" de Guayaquil, fue un timbre de honor para el periodismo y la intelectualidad Manabita.
Don Raymundo Aveiga fue hombre de ideas liberales y ampliamente democráticas. Amaba los inconmovibles principios de la Justicia Social, rendía culto a todo lo que significaba el bien colectivo, fue un verdadero humanista, amante de las grandes causas y defensor ardiente de los derechos del hombre.
Raymundo Aveiga Moreira fue el único Manabita que sostuvo con altivez una polémica Periodística con el eminente banquero y Economista Guayaquileño, Don Víctor Emilio Estrada, fundador del Banco “La Previsora". La polémica versó sobre complejos problemas de orden bancario, monetario, política Cambiaría, asuntos crediticio y también bursátiles.
La polémica duró varias semanas, manteniendo en suspenso a los sensores económicos y financieros de todo el país y ocupó varias ediciones de los principales rotativos Guayaquileños„ Emilio Estrada estampaba sus ideas en las columnas de Diario “El Universo" y Aveiga Moreira lanzaba las suyas en las páginas de Diario "El Telégrafo", ambos porteños. Los círculos financieros de la nación juzgaron saludable el enfrentamiento de ambas mentalidades en el campo hacendarlo, concluyendo con la felicitación y actitud cordial de Estrada para con Aveiga, impresionado a la vez por amplios conocimientos de la materia que supo exteriorizar el Manabita, demostrando una vez más que la inteligencia de Raymundo Aveiga era de indiscutibles contornos polifacéticos.
Raymundo Aveiga, fue un prestigioso escritor, poeta y filósofo, escribió múltiples ensayos, autor del drama “El sacrificio de Enma”, así como escritos polémicos sobre las finanzas del Ecuador, por lo que se trenzo apasionadamente con el banquero Emilio Estrada. Como hombre y ciudadano tuvo la personalidad bien formada de conciencia rectilínea, fue un varón íntegro y completo, luchador y rebelde de los intereses manabitas del campesino, agricultor de crédito bancario y de la finanza.
Don Raymundo Aveiga fue un hombre de extraordinaria, fecunda y esclarecida mentalidad, pues paseó su talento múltiple por los predios de la ciencia económica, política, pedagógica, filosófica y dialéctica, para luego irrumpir con éxito en el arte literario.

TALENTO POLIFACÉTICO DE RAYMUNDO AVEIGA

Su talento mu1tífacétíco cobró relieves en el campo de la Pedagogía, comenzando a ejercer en las filas del Magisterio, ocupó la Dirección de la Escuela "Fraternal", pasando por las aulas de este templo del saber lo más grande de la Juventud Chonense, así como de otros lugares de Manabí.
En esta primera escuela comenzó a burilar el corazón y el alma de los jóvenes transmitiendo sus conocimientos profundos en las disciplinas de: Matemática, Geografía, castellano, Nociones de Economía y Ética.
En días no lejanos sus discípulos fueron personalidades distinguidas en el campo de la intelectualidad Manabita y Ecuatoriana, entre  éstos: Marco  Uscocovich  Beuta, ex - presidente de la FEDECAME internacional, con asiento en Nueva York, Estados Unidos Dr. Oswaldo Castro Intriago, Matemático, Economista, Novelista, Autor de la "Mula Ciega insigne políglota, jubilado como técnico de la FAO en las Naciones Unidas. Dr. Gonzalo Abad Grijalva, ex-técnico de la UNESCO y ex-ministro de Educación Pública el Ecuador, Dr. Pío Severo Villamar, notable Jurista, ex Ministro Juez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Augusto Solórzano Hoyos ex- Catedrático del Colegio Nacional "Vicente Rocafuerte" de Guayaquil. También el poeta Wilfrido Viteri Medranda el pedagogo Isidoro Mendoza Navarrete, el ex Legislador Manabita, Trajano Viteri Medranda,  Los ya mencionados fueron distinguidos discípulos del Pestalozzi Chonense.     
Por otra parte Don Raymundo Aveiga por ser hombre de vastísima cultura ocupó importantes funciones en la Administración Pública Nacional; fue Jefe Político de los Cantones: Chone y Manta; Gerente del otro Banco "La Equitativa", fue inspector de Estancos en Chone, fue Gerente de los Monopolios del Estado en Manabí, fue magnífico editorialista del Decano de la Prensa Nacional Diario "El Telégrafo" de Guayaquil, ocupó en las postrimerías de su existencia la Notaría Primera del Cantón Chone.
Su recia personalidad intelectual lo llevó a destacarse como orador elocuente en todas las tribunas en que dejó escuchar su verbo imponderable, fue escritor atildado, "periodista fecundo, polemista hábil, brillante catedrático, dramaturgo, pedagogo, sociólogo, erudito, libre pensador y humanista.
Desgraciadamente   nació  o vino   al   mundo  en  un país  muy   pequeño   como   el   nuestro,   pues   si   Aveiga  Moreira   hubiera   nacido   en   las   postrimerías   de   la República   en   Roma,   bien  habría   llegado  a   ser   un  Cicerón,   si   hubiera   surgido  en  el   siglo   XVIII   en   Alemania,   habría   sido   un  Schopenhawer,   si   en   España de fines del siglo o en la España del comienzo del sig1 o XX habría emulado a Jacinto Benavente, a Miguel de Unamuno o a José Ortega y Gasset si hubiera surgido en Argentina, habría rivalizado con Domingo Faustino Sarmiento o con Bartolomé Mitre, podría haberse parangonado con Don Andrés Bello o Don Rufino Cuervo.
Este personaje Manabita de magistral talla intelectiva, hizo de su vida un ejemplo luminoso para nuestra juventud y nuestras generaciones venideras y es orgullo inmarcesible y sempiterno para Chone, Manabí y 1a Patria. 

EL MAESTRO
  
Raymundo Aveiga fue un estudioso a toda prueba, un asiduo investigador, hombre de letras, de concepciones elevadas, como educador rindió profundo culto al laicismo, bajo cuyas normas solamente concebía la preparación del niño y del joven.
Jamás emitió un concepto, sino mediante una deducción lógica y científica, que proporcionara convicción.  En todos sus discípulos supo inculcar las normas de investigación de la verdad, a base de razonamientos concienzudos y del análisis severo, prolijo y acertado.  Perseguía con afán noble la modelación espiritual, porque era maestro de conciencia, por inspiración, por temperamento y por vocación.
La carrera docente de Aveiga tiene un punto de partida en la escuela del recinto o del sitio, sin implementación didáctica, por él con emoción de maestro suple estas incomodidades pedagógicas. Allá en el rincón del agro Manabita se inicia el Maestro en su noble apostolado. Y mientras el viejo luchador Don Eloy Alfaro alumbra los horizontes de la Patria con la antorcha de la libertad, creando nuevas modalidades de gobierno y orientando el progreso del país, su comprovinciano Raymundo Aveiga, inicia la campaña civilizadora para organizar los ejércitos de la cultura.
Abrazando la carrera del Magisterio, con amor a las ciencias, a la educación y al niño. Ya anuncia la enseñanza puericentrista "El niño es un nuevo mundo de conquistas espirituales que ha de servir mañana a los intereses de la Patria, si lo conducimos por la amplia vía de la ética y la cultura moderna".
Acorde con estos principios dedicase a auscultar los sentimientos y aspiraciones del educando en procura de una integral educación.
Funda la Escuela "Fraternal" en la Ciudad de Chone de carácter particular porque su espíritu no se conforma con los regímenes educativos que no consultaren libertad para el niño, quien debe desenvolverse en un ambiente familiar y de confianza; prestantes elementos manabitas nutrieron su personalidad en estas aulas. Después paso a colaborar en el Colegio "10 de Agosto", Plantel fundado por Don José Mera López, en el cual dio a conocer sus dotes de maestro demostrando que el conocimiento del alma del niño no debe estar lejos del Maestro.
Luego de haber viajado al exterior, en busca de salud para su mal de bery-bery, es en Bahía de Caráquez donde presta sus servicios en el prestigioso Colegio Mercantil. Pasado un tiempo regresa a Chone para continuar su incansable labor de maestro, es acá donde se lo admira y estima por su vasta cultura producto de un autodidactismo que sorprende.
Por el año 1903 el Municipio de Chone le propuso la Dirección de la Escuela "San Benito", proposici6n que aceptó de mucho agrado, ya que consideraba que en uno o en otro campo de la educación el maestro cumple un apostolado, por lo que podría considerarse su ideario pedagógico.
-Instruir poco pero intensamente.
-Conocer el espíritu del niño y respetar su personalidad.
-Es decir se adelanta así a la Escuela Nueva.
Hay un paréntesis en la vida del maestro y temporalmente se aleja del trabajo docente que tanto lo deleitara, para accionar como Contador de la Casa Comercial de Don Elio Santos Macay, en la que por su honradez y capacidad fue ascendido a Gerente en 1906.
El ambiente de la escuela lo sugestionaba y retorna a la docencia en 1909, organiza la Escuela libre y la ubica en su quinta denominada “El Vergel” a pocas cuadras del corazón de la ciudad. Allí el niño crece y se educa en un ambiente ideal, amplitud, comodidad, vegetación y el rio favorito. En esta escuela al aire libre puso en práctica el método Pestalociano, con una educación semejante a la que daba Rabindranath Tagore en la india, los niños solían estar en las aulas, como en su hogar paterno, rodeados de solícitos cuidados y de atenciones desconocidas en otras escuelas. Ilustres ex-alumnos suyos manifiestan sobre las bondades de esta escuela, porque las clases, castigo corporal y el despotismo que empleaban otros maestros.
El eminente académico, profesor Justino Cornejo en las recomendaciones que mediante encuesta se le solicitare, señala:
“Don Raymundo Aveiga”, fue un educador por encima de todo, es figura cimera de Manabí,  Por sus aulas  pasaron algunas generaciones  de choneros, que bien tiene  derecho a que se perpetúe  su memoria.  Hay que recoger el Anecdotario de este Sarmiento del trópico, porque agregamos nosotros.
Aveiga como Sarmiento, ambos de rostro tostado por el ambiente, líneas faciales semejantes, ambos severos para consigo mismo, de carácter indomable a fuerza de perseverancia en sus propósitos La mirada penetrante, guarnecida por rebeldes cejas dan la impresión que saben ver más allá de la vulgaridad en la búsqueda de mundos nuevos.
Aveiga como Sarmiento manifiestan un espíritu vocacional inconfundible, organizaron modestas escuelas, lejos de las grandes urbes, conocedores de la necesidad que tienen de instruirse los pueblos. Bien dicho que Raymundo Aveiga es el Sarmiento Ecuatoriano.
El Lic. Carlos Avellán Vera para complacer a su distinguido maestro, Don Justino Cornejo inserta una anécdota que evidencia el temperamento de Raymundo Aveiga.
“…Una mañana del mes de julio inicio sus clases en el Liceo "Lincoln" como de costumbre.  Este Liceo fue organizado y dirigido por Aveiga en la Ciudad de Chone.
Por algunos aspectos de conducta, no tan edificantes que se diga, uno de sus alumnos, joven ya hacía observaciones en ferina general con el afán de dar lecciones de cortesía y compañerismo a los estudiantes tomando motivos de la vida real. Sin embargo de no haber determinado al culpable, éste descubriese como tal, hincando un afilado puñal sobre la mesa del pupitre que ocupaba, desafiando y con aquella arma blanca el maestro que cumplía su deber. Al terminar las observaciones, se acercó al proyecto de criminal le dijo: hunde ese puñal en mi pecho si eres asesino.  Los hombres de bien no buscan puñales, mi pecho es muy amplio para que sacies tus instintos sanguinarios".
Como en forma decisiva le insistiera, el dueño del puñal se acobardó y, rehuyendo el fuego de las  miradas del maestro, quedo avergonzado. No por esto dejó de darle ejemplar castigo. Después de pocos momentos golpeaba la puerta de la escuela el Padre del Alumno, que había estado observando desde su balcón aquella escena.
Don Raymundo: vengo a estrechar su mano, porque veo en Ud. al maestro y al hombre sagaz. Le felicito, porque sea una autoridad en el Liceo.
Gracias amigo mío. He cumplido mi deber y esto me satisface; pero también me alegra que Ud. sepa colaborar con el Liceo, para la formación correcta de los futuros ciudadanos. Esto es lo que hace falta hoy y faltará siempre, de parte de los Padres de Familia: acercamiento a la Escuela y comprensión del problema educativo. Ud. es una hermosa excepción
El Caballero de la Triste Figura, periodista de la época, escribe sobre la muerte de Don Raymundo Aveiga. Se fue el Maestro para siempre, pero nos dejó su ejemplo forjador de grandes ideales y cargado de inagotables recursos dejando sembrado en la conciencia de sus discípulos saludables inquietudes promisorias de un mañana mejor para su pueblo que tanto amó.  Sus lecciones de buen ciudadano nos servirán de norte en las escabrosidades de la vida.
Su memoria vivirá con nosotros como una eterna gratitud para su talento benéfico, para su docencia bienhechora y de sanos ideales en el seno de la Patria. Vivirá en nuestros corazones como gigantesca lámpara, alumbrando a través del tiempo y del espacio la conciencia de su pueblo…”
Insertamos un suelto de crónica en la Revista INICIACIÓN de fecha de Agosto de 1922, en la que se expresa así de Don Raymundo: "Cerebro que vive las ideas. Carácter que sigue la ruta señalada por el deber sin temor a compromisos ni consecuencias".
Como escritor es muy conocido su "Sacrificio de Emma" y muchos periódicos han sentido las áureas de la popularidad, gracias a su pluma castiza y tajante. Como hombre práctico ha sido el iniciador del Banco de Manabí, fundador de la Sociedad de Agricultores de Chone.
Publicó en el Globo en 1920 un proyecto para la fundación de una gran Institución como es el Banco Nacional, con unos treinta millones de Sucres para atender a la agricultura, vías de comunicación y colonización de nuestro Oriente.
Lanzo también hace algunos años, otro proyecto para la fundación de un banco Agrícola, cuyas emisiones tendrán por garantía la propiedad rural.
Como Maestro ha concurrido al Congreso Pedagógico en Quito en 1916 y fue designado por el voto unánime de sus colegas para llevar la palabra ante la sociedad Jurídica-Literaria.
Es poeta de la Escuela Clásica, pero ha pulsado con buen éxito la Lira Modernista.
Hoy solo canta de cuando en cuando, porque sus ocupaciones como Capitán de Puerto le dejan poco tiempo de que disponer…"